Nos encontramos desconectados y ajenos a cuanto nos rodea. En nuestro transitar contemporáneo hemos perdido, en gran medida, aquellos medios simbólicos que nos hacen sentir parte de una estructura común que nos cobija y reconoce. El ritual no es solo una manifestación religiosa, sino un acto que nos recuerda que existe una conexión mayor con la vida y que nuestros procesos más íntimos están, de hecho, llenos de significados. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=prnXmXK86tU