En esta presentación el autor registra algunas de las dificultades que tanto el investigador como la institución tienen a la hora de respetar las actitudes
mínimas como profesionales de un oficio altamente complejo como lo es la investigación. El dilema moral está presente en la toma de posturas teóricas,
prácticas, culturales, institucionales y en definitiva saber si el investigador cumple con un mínimo de condiciones para ejercer tareas investigativas.